Partes básicas de un ascensor

Mucho han cambiado las cosas desde que Arquímedes inventara dos componentes básicos de los ascensores allá por el año 236 a.C. Nos referimos a la polea compuesta y el tornillo que lleva su propio nombre. El primer ascensor de la historia era rudimentario, consistía en una plataforma sujetada por cuerdas y que se accionaba con la fuerza humana. Sin embargo, en nuestra empresa de plataformas elevadoras en Madrid sabemos bien que este invento ha llegado a ser una de las máquinas más desarrolladas a nivel tecnológico.

Los ascensores actuales se componen de diferentes partes y piezas que conforman el entramado que nos permite disfrutar de esta obra de ingeniería a diario. Desde Ascensores J. Pascual queremos destacar cuáles son las componentes más importantes de estas máquinas:

Cuarto de máquinas

Una de las partes más importantes, ya que es donde se encuentra el cuadro de maniobras y el grupo tractor. El primero es el responsable de que el ascensor se detenga en el piso que hayamos marcado y pueda desplazarse entre las diferentes pantas. Podemos compararlo con el cerebro de esta máquina. Mientras que el grupo tractor está formado por el motor, que deberá acoplarse a un reductor de velocidad. En el eje, encontramos la polea que es el lugar donde se sitúan los cables que sostienen la cabina y el contrapeso.

Cabina

Es el elemento más visible, el que vemos en todos nuestros viajes. Nos referimos al habitáculo en el que nos movemos entre plantas. Esta parte del ascensor se compone de: bastidor o chasis y caja o cabina. El primer elemento se apoya en unas guías verticales que son las que se encargan de que los desplazamientos de la cabina sean suaves sin colisionar con las paredes. Existen muchos modelos diferentes de cabinas y pueden decorarse de múltiples formas.

Dispositivos de seguridad

La seguridad de los ascensores es la cuestión que más ha evolucionado con el paso del tiempo. Uno de los elementos de seguridad más importantes es el paracaídas, un sistema que se coloca en el bastidor y que se ponen en funcionamiento si la cabina coge una velocidad excesiva. Además, impide que la cabina caiga al vacío. Las puertas se abren y se cierran cuando subimos y bajamos del ascensor, pero los modelos actuales cuentan con células fotoeléctricas que impiden que las puertas nos aprisionen al cerrarse mientras pasamos. Por último, cuentan con un dispositivo de parada de emergencia que en caso de parada del ascensor, acerca la cabina al piso más cercano con el fin de evacuar a las personas que hayan quedado atrapadas.